miércoles, 26 de enero de 2011

"EL VAMPIRO"

Asustado se despertó. Se incorporó en la cama. No conseguía librarse de la impresión de haber muerto.

"Tienes sed. Caza y bebe."

Ese pensamiento lo atormentaba; resultaba más aterrador cuando despertaba con los labios llenos de sangre y se volvía brutal al escuchar las noticias de sucesos en televisión.

Se obligó a alejar la idea de que era un vampiro, a desterrarla como posibilidad. No tenía tiempo para lamentaciones. Tenía que descubrir que le estaba pasando.

Tenía hombres que matar.

Caminó en silencio y se detuvo ante la ventana. Miró los tejados y las calles vacías que parecían llamarle. La luz de la luna aún se veía entre las nubes y sabía que el amanecer no lo iba a matar.

"No. No soy un monstruo."

En ese momento, desconcertado, vio pasar como un destello brillante a aquella joven. Por un momento, recordó algunas antiguas leyendas húngaras, rumanas y yugoslavas, leyendas que estuvo a punto de no aceptar hasta que la conoció. Le gustaba aquella joven, había algo en ella que le atraía.

Pero él no pudo descubrirlo hasta después de haberse enamorado de ella. Al principio se sintió intrigado. NO creía en vampiros. Nunca lo haría del todo. Y, sin embargo, a solas en su piso mirando por la ventana, por primera vez sintió miedo. Con todas sus fuerzas luchó con la fatal idea, se giró, caminó por el pasillo, y salió de casa con el fin de apaciguar sus enfurecidos nervios. Las sombras del miedo estaban en todas partes, le hacían arder la garganta y desear saciar esa sed que lo acuciaba. Volvía a notar ese olor dulce, atrayente, el olor de la sangre.

Al fondo del parque, un piso de un edificio cercano tenía la ventana abierta. El olor era allí más atractivo, más magnético para él.

Pero se alejó de allí.

No podía atacar a la mujer que vivía allí. Qué fácil sería olvidarse de su humanidad y dejar salir al monstruo que llevaba dentro. Avanzó por las calles. Entonces encontró a su víctima un joven que volvía de ir de marcha. Lo alcanzó cuando salí del coche. Lo sujetó con las dos manos, fuerte, sin parpadear. Usando y dotando el momento de un aire teatral. hizo que lo mirase a los ojos.

El rostro del joven mostró una extraña expresión. Desconcierto o consternación. Al mirar sus ojos los supo. Miedo.

Iba a ganarlo el frenesí salvaje. Justo cuando el joven iba a gritar, mordió su cuello de forma rápida y certera, ahogando el grito incipiente antes de nacer.

Sin embargo, no lo mató, tampoco lo convirtió, pues sólo bebió la sangre cuando el veneno iba a convertir al joven. Cuando terminó y dejó al joven en el coche , las marcas del cuello dejaron paso a un reguero rojo; la escena era horrible y llevó el coche al pantano. Lo aparcó al lado del cementerio y dejó un rastro de sangre hasta el muro.

Una pareja lo vio de refilón. Los persiguió. El chico cayó inconsciente. A la chica la dejó en trance. Sentó al chico la Volante haciéndolo que sus huellas quedasen en el vehículo. Después vació su cuerpo y se lo llevó de allí. Lo metió en un nicho vacío del cementerio y lo olvido.

Luego colocó a la chica en el asiento de atrás, desnuda. Y, mientras le chupaba parte de su sangre la hizo sentir un gran placer. Después desvistió al joven y lo colocó sobre ella. A ella le colocó la boca en torno a la herida del cuello del joven, y al joven en la herida del brazo de ella. Después se alejó de allí.

Pero algo había sucedido. Ninguno de ellos murió. Sobrevivieron y extrañamente, como si un vínculo los uniese se casaron. Siempre se preguntaron como habían sido encontrados así. Las únicas huellas en el vehículo, las suyas y las del novio desparecido de la joven.

Mientras, consciente de su destino. Aquel que hizo todo marcho de allí hacia el lejano norte, antes de cometer un desliz mayor.

No había duda. Él era un vampiro. Ya no podía negar su existencia.

3 comentarios:

  1. Me gusta mucho este relato, en realidad todo lo relacionado con vampiros me encanta.
    FELICIDADES.
    Te invito a leer mi novela luna.
    http://lunaoscuraforasteraluna.blogspot.com
    Gracias, un saludo.

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  2. Prometo leer tu novela y hacer un comentario en mi blog al respecto.

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  3. ¡¡me encanta Miguel!! ya sabes que los vampiros me chiflan jejejeje

    lo dicho, me ha gustado mucho!!

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